miércoles, 7 de septiembre de 2011

El Viento


En el viento mañanero lo conocido se mueve, cambiando sin forma. La razón cristaliza las palabras quedado presas de la ilusión. Al no tener lugar de morada, lo que se haga se convierte en impermanente.
El estado original se muestra como un instante de reposo, los pensamientos ilusorios desaparecen en un sólo abrir y cerrar de ojos, hay un darse cuenta de que nada queda por lograr.
Cuando sopla el viento, nada espero a menos que sientas eso que yo quiero, la experiencia, aunque loable, es inestable, se mueve, va y viene como el viento mañanero.
La realización de sí mismo no es un producto, es de la naturaleza de la comprensión, una vez con ella, el sabor de lo real no se abandona y el mirar profundo no es posible de evitar.
Vía observación sin juicio las alas de los procesos mentales se cortan, permaneciendo inafectado el movimiento de la conciencia centralizada. R.Malak

No hay comentarios: